No todo es negro

No cabe duda que el infierno lo hacemos nosotros mismos. Hace unos minutos, estaba yo, con el hígado, corazón y testículos en el cogote, debido a que tenía que hacer una llamada al casero, para informarle que queríamos pagarle los dos meses y medio de renta [más lo que se junte en la semana] que le debemos.

Mi propuesta era, dejarle dos de las tres computadoras que tenemos en virtud de garantía de pago, además de que si quería podía ir a nuestra casa y revisar si había alguna otra cosa de valor, que quisiera quedarse en prenda mientras pagabamos. Pero resulta que no lo aceptan. En el momento que me dicen: "no creo que sea posible", por mi mente pasan cientos de nombres de amigos, familiares, vecinos, etc, etc, que puedan prestarnos dinero para solventar la deuda y pagarles a ellos poco a poco, lo malo es que resulta qu nombre que se me atravesaba, nombre que tenía un sin fin de problemas financieros al igual que nosotros.

Me dicen: "El chiste es que usted liquide lo que nos debe", yo les digo que sí, que no pretendemos no pagarles, sólo dejar en garantía de que pagaremos las computadoras, que lo que queremos hacer es pagarles de a poco, semanalmente, entre mil o dos mil pesos hasta lograr ponernos al corriente. Contra toda esperanza, me responden que sí, que no hay problema, siempre y cuando se vea la intensión de pagar.

¿Cómo ven? todavía hay gente amable en este mundo. Me sorprendió sobremanera, la atención tan digna que nos han prestado. Cosas así no pasan todos los días

JM